Con el calor que está haciendo este verano es necesario buscar nuevas vías para convertir los cupcakes en refrescantes dulces. La solución cucuruchos de pop-cakes recubiertos de chocolate recién salidos de la nevera.
Puede parecer que los cupcakes son un dulce que únicamente se puede comer cuando hace frío, pero a continuación os enseñaré el resultado de hacer un mix entre helado y magadalena.
Previo a los cucuruchos pop-cake hice unas magdalenas de vainilla con la receta clásica y otras de chocolate. Con las que me sobras desmenucé las magadalenas y las mezclé con queso philadelphia,, la proporción es más o menos 10 partes de magdalena 8 partes de philadelphia.
Una vez estaba bien mezcado hice unas bolas del tamaño del diámetro del cucurucho. Como pensaba llevar estos cupcakes a mis sobrinitas incorporé una sorpresa en los cucuruchos, lo llené de lacasitos y después coloqué la bola encima. Luego dejé enfriar en la nevera.
Por otro lado, deshice chocolate fondant y chocolate blanco. Al chocolate blanco añadí colorante rojo para conseguir una tonalidad rosa. Cuando el cucurucho estaba frio y el pop-cake estaba duro lo sumergí en chocolate negro y otra vez a la nevera. Cuando el chocolate se había enfriado repetí la misma operación pero esta vez con el chocolate blanco coloreado, y sin sumergirlo completamente. Finalmente completé la decoración con un lacasito.
Como me sobraba masa de pop-cake hice una bolas más pequeñas y las rebocé de bolitas de colores de caramelos y las coloqué en un pincho.
Por cierto aprovecho para añadir el link de una canción que he ido escuchando estos días al Kitchen Music, The marquee de Gigi.
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